El premiado podrá disfrutar de un viaje al destino que desee, diseñado a su medida y valorado en 5.000 euros.
La campaña impulsa un mensaje motivador que invita a que nos replanteemos nuestras prioridades y nos centremos en lo realmente importante: disfrutar de la vida.
Ya se conoce el ganador de la campaña promocional “La vida no se vive, se disfruta” que Bodegas Barbadillo ha llevado a cabo este verano de la mano de su vino Barbadillo Blanco de Albariza y con la que ha querido seguir haciendo hincapié en su nuevo propósito de marca, que invita a centrarnos en lo verdaderamente importante.
El afortunado que ha conseguido el principal premio de la promoción -valorado en 5.000 euros-, José Andrés Ramírez Quintero, podrá viajar al destino de sus sueños, al lugar del mundo que desee y con quien desee, y escoger una experiencia a su medida.
Además, todos los usuarios que participaron en el “rasca y gana” virtual de la campaña en lavidasedisfruta.com han obtenido un premio seguro: descuentos del 15% en nuestra web www.barbadillo.com .
Blanco de Albariza, esencia del Sur
Como parte fundamental de la renovada marca Barbadillo, Blanco de Albariza ha sido rediseñado sin perder de vista los conceptos de origen: suelo y uva palomino fina.
Barbadillo Blanco de Albariza se elabora con uvas palomino fina seleccionadas a pie de viña en tierras de albariza, caracterizadas por su color blanco, su salinidad y por retener la humedad, para garantizar la vertiente más fresca y más viva de esta variedad.
La uva palomino fina resultante, equilibrada en acidez, fresca y con mucho sabor, es el origen de este vino de color amarillo pálido y aroma fragante, joven y afrutado que lo convierten en perfecto acompañante de tapas, aperitivos y entrantes como el jamón, quesos suaves y frutos secos. Su particular sabor es el complemento ideal de pescados y mariscos, arroces, verduras y ensaladas de ahumados. Se debe servir frío, entre 6º y 10ºC.
Es el compañero perfecto para sacar partido a los últimos días del verano y disfrutar centrándonos en lo verdaderamente importante. Porque “La vida no se vive, se disfruta”.